martes, 12 de agosto de 2008

Mucho trabajo

Es una frase célebre por estos lares... habrá quienes si estén enrolados en un sin fin de actividades y habrá quienes solo quieran darse su paquete; es un asunto que no debería importarme peeeero si el trabajo que esa persona desempeña me afecta directamente a mi, por supuesto que tendré que quejarme o tomar medidas.
Casos, tengo dos.
El primero es el de una persona que ha sido designada mi asistente. Entre su "escasa compatibilidad" con la tecnología y el hecho de que se autoimpuso un "alzjeimer" nomás no da una y cada que llego a la oficina escucho cosas como: "no funciona la impresora", "y ahora que tengo que hacer", a reserva de las llamadas matutinas para preguntarme por algún pendiente que yo marqué claramente cómo se debía hacer. Al parecer ella interpretó lo contrario: yo seré su asistente.
El segundo caso es el de los agentes de tránsito, ¿han visto cuánto trabajo tienen?. En Apodaca están muy muy trabajadores, todos los días me topo a algunos cuantos bien paraditos en sus lugares vigilando que los conductores no violemos los límites de velocidad o las reglas de tránsito. ¿Pueden creer en tanta belleza?. Yo no y he comprobado indirectamente que eso no es más que una farsa que sirve para acaparar ingresos en tiempo de vacaciones y que, por supuesto, me hace cuestionar su labor durante el ciclo escolar.
Mi padre, por su trabajo permanece mucho tiempo fuera del país. Regresa cada 3 o 4 meses según sea el país al que va o la programación de labores. Hace poco más de una semana llegó. El viernes 8, iba para mi casa (mi papá) y se encontró con una de estás criaturas; estaba escondidito por ahí y repentinamente se apareció y le marcó el alto por circular a exceso de velocidad en zona urbana. Mi padre admitió el hecho y se puso a merced del agente, le dijo que hiciera lo correcto y que levantara la infracción. Como bien suponen, el agente comenzó a declamar la famosa cantaleta del costo de una infracción de ese tipo, de los trámites que hay que hacer, del tiempo que hay que perder... todas las observaciones hechas por este espécimen son la manifestación de que no estaba haciendo su trabajo, sino más bien una colecta en nombre de las vacaciones y de los útiles escolares que debe proveer a su familia.
El fulano pedía 100 pesos, y para su mala suerte mi padre no traía más que billetes de los países por los que transita en su viaje, para no hacer el cuento largo, después de hurgar en la cartera solicitó que fingiera estar firmando su libretita de infracciones y que ahí metiera 4 dólares que andaban por ahí. ¿Lindo no?. Quedará en duda el comportamiento del agente, en caso de que no hubiera tenido acceso a la cartera.
A mi me había pasado algo similar. En un día de mayo de este año, iba camino a la escuela de Diego que también está en Apodaca (desde CU). Estaba perfectamente conciente de que era hora de cruce de escolares y que debía moderar mi velocidad en los retenes que ya conozco. Para no caer en un episodio de estrés por tener que manejar a esa hora una larga distancia y recorrerla de regreso, me abstraje en mis pensamientos y pasando por un crucero escolar me detuvieron porque iba ligeramente excedida de velocidad. El fulanito pidió mis documentos, los revisó, me dijo el procedimiento y me aclaró que eso que estaba haciendo era por mi bien; aún no había empezado a escribir la infracción. Le agradecí llamarme la atención, acepté mi responsabilidad y le dije que procediera a hacer su trabajo. Me empezó a platicar un cuento similar al que le contaron a mi papá, solo hizo un agregado acerca de la corrupción a lo que yo le contesté que estaba completamente en contra de dar mordidas y que no iba a ofrecer ni soltar un solo centavo. Todo ese diálogo me tomó unos 10 minutos y me dejó ir, sin infracción de por medio.
Por último, dejen les cuento de los operativos antialcohol. Mucho se ha hablado de ellos: que si son buenos, que si son malos, que si van en contra de los derechos humanos, que si evitan muertes, que si esto que si lo otro. En un ir y venir de comentarios, se han escuchado los que hablan de la corrupción, que este operativo no es más que una pantalla que sirve para sacar dinero. En un principio quizá no fue así, se de buena fuente que dabas positivo y trepaban tu carro a la grúa. Hoy, no estoy segura de ello. He visto operativos misteriosos en los que ni siquiera hay próxima una grúa y en los que ni siquiera es necesario tener alcoholímetro porque sabemos que es un hecho que habrá miles de ebrios pululando por ahí (partidos de tigres y/o rayados). Ellos lo saben y como tienen "autoridad" van y montan su teatrito en cualquier calle con buena afluencia y hacen su voluntad: "sacar para la papa". ¿Podrán decir algo en su defensa?. Quizá culpen al sistema, al gobierno e inlcuso a aquéllos que les dan mordida. Lo cierto es que estábamos mal y seguimos mal, con todo y las campañas que se han hecho en contra de la corrupción.

La pregunta del millón, ¿qué fue primero?, ¿el corruptor o el corrupto?

"Tengo mucho trabajo", voy a seguirle

jueves, 7 de agosto de 2008

Una rapidita

Estoy a unos minutos de entrar a clases y estaba leyendo una revista de divulgación de la ciencia (un tanto ligera) que edita la UNAM, se llama ¿Cómo ves? y en su número 17, página 7 viene una nota acerca de la Mariposa Monarca:
"La reserva de la Mariposa Monarca
La UNESCO, declaró oficialmente a la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca y al pueblo de San Miguel de Allende como Patrimonio de la Humanidad, junto con otros 11 sitios en sitios en países como Cuba, China, España y el Reino Unido.
Esta reserva, creada en abril de 1980, es un área natural protegida de más de 56000 hectáreas, en los estados de Michoacán y México. Cuenta con 5 santuarios que son sitios de hibernación al que llegan las monarcas en su ruta migratoria desde América del Norte"


Según dice en el artículo, tanto la UNESCO como el Comité del Patrimonio Mundial pretenden atraer mayor atención del público así como una mejor apreciación de los sitios de Patrimonio Mundial, inspirando al mismo tiempo una voluntad mayor de conservarlos.

Ahora si que aludiendo a la publicación antes mencionada, ¿Cómo ven?.

Me retiro a mi clase.

martes, 5 de agosto de 2008

De regreso

A la vida laboral intensa... no estuve de vacaciones como cualquiera de mis alumnos, que por cierto llegaron presumiendo bronceado o marcas de traje de baño (marcas tipo tatuaje, no de diseñador) y quisiera presumir de haber descansado mis ojos y mis patas de gallo, pero definitivamente eso es imposible ya que cuando sale la luna es cuando me llega la inspiración para leer, coser, escribir, entre otras cosas lo cual provoca que no duerma mis sagradas ocho horas o que duerma de más pero sin descansar, cosa que resulta igual o peor de horrorosa que no dormir ni una hora. En fin, como decía, no estuve de vacaciones en una playa pero si me tomé uno que otro día para no ir a la oficina, no asolearme y no manejar (entre tanto cafre y agujeros es un gran alivio no tener que salir a lidiar con ellos) y como se habrán dado cuenta tampoco le hice mucho caso a la computadora unos cuantos días: justo y necesario.
Hace una semana estaba cual niño de primaria: ¡tenía terror de volver a mi jornada normal!, pero milagrosamente hoy me levanté a temprana hora y me fui a caminar al parque, de regreso hice más ejercicio en mi cuasi-elíptica y al terminar me puse a recoger ropa y a planchar otra. Para la hora que prometí estaba en la escuela, atendiendo montones de pendientes: remodelaciones, letreros, extintores, hojas de seguridad, inauguraciones, horarios, laboratorios, clases, etc., etc. y para rematar una clase de maestría que no recordaba. Aún con todos esos pendientes, me dio gusto regresar... digamos que lo difícil es vencer la inercia y más si ésta es tan cómoda.
Han empezado las clases y no me resta más que esperar el resultado profesional, personal y laboral que me dejará este nuevo semestre.
Es hora de dormir porque pretendo levantarme a caminar por la mañana. Me despido por ahora... prometo regresar pronto.