jueves, 17 de junio de 2010

$9

Rápido que estoy de regreso esta vez. Hoy nos ganamos nuestros primeros pesos (que fueron 9) por concepto de reciclaje. Desde hace tiempo empecé a separar la basura en casa, con la intención de que los señores del municipio se la llevaran y ellos mismo le sacaran provecho, pero no se si tienen alguna indicación de sus jefes de no hacer sus bonchecitos o son muy orgullosos, que ni cosas servibles las rescatan de la compactadora. El caso es que estando en el proceso, me enteré que en la tienda de la S que dice tener "aprecio por ti" tienen centros de recolección de papel, aluminio y vidrio y como mi casa (que es su casa) es de interés social y los metros cuadrados por habitante están contados, decidimos que hoy era un buen día para llevar lo que teníamos almacenado.
Para el transporte ya había un plan primario. Algún día iríamos a dejar todo cuando saliéramos a nuestra caminata vespertina y así fue. Sepan que cuando salimos de casa traíamos una bolsota llena de papel, unas cuantas botellas de PET (porque el primer paso fue reducir el uso del mismo) y otras tantas botellas y frascos de vidrio. Para llegar a la tienda de la S tenemos que caminar como un kilómetro, quizá un poco más. Durante todo el camino, fuimos haciendo labor ecológica y recogimos muchas de las botellas de PET que nos encontramos aún sabiendo del riesgo de no poder dejarlas en el centro porque uno de los requisitos es que deben estar limpias (enjuagadas). Imaginen, 1 km de recorrido lineal en el que había como 40 botellas de PET tiradas, grandes y pequeñas, y entre las que predominaban las de refresco. Empezamos a divagar y a pensar en las posibles enunciados "estadísticos": "En un muestreo aleatorio sin reemplazo, se encontró que 3 de cada 40 botellas pueden contener pis en su interior, que 25 de cada 40 botellas son de refresco, que 3 de cada 40 son de refrescos de 2 L..." hay más cosas espeluznantes que se puede comentar de este evento. Llegamos, preguntamos y advertimos que las botellas venían sucias y aún así nos las aceptaron. Pesaron todo y nos entregaron un papelito donde la información ya venía rústicamente codificada para que en la caja hicieran lo debido con el dinero electrónico. Esa parte es la desagradable (incluso más que ir recogiendo botes sucios de la calle): hacer fila, meter la información codificada al sistema, sacar y meter dinero, etc. Nos entregaron nuestros 9 devaluados (pero valorados) pesos, de los cuales el paqueterito se quedó con dos y nos fuimos con la satisafacción de haber hecho algo bueno por el planeta (eso lo dijo Diego en el camino, tantas veces como pudo). Nosotros, además, nos quedamos con la satisfacción de haber enseñado al hijo una vez más con el ejemplo.
De regreso a casa, decidimos tomar otra ruta, para seguir con la labor; no habíamos salido del estacionamiento de la tienda de la S cuando ya llevábamos 4 botellas (1 de 2 L y 3 de 0.5 L, ni una con pis). En el camino, un señor de aspecto humilde, con una (deliciosa y apetitosa) caguama en mano nos preguntó "A poco si lo compraaaan (8)", nuestra respuesta fue "si, en la tienda de la S a $1 el kilo", asintió y siguió su camino, mientras yo comentaba que su caguama podría comprarla con darse una vueltecita a la colonia, juntando botes e incluso la disfrutaría más porque tendría más sed.
Decía que de regreso fuimos juntando más "basurita" y creánlo o no, llegamos a casa con otros 40 botes (aprox.). Esta vez los dejamos afuera de la casa, por si algún interesado se los quiere llevar y de no ser así, discretamente los abandonaremos en la tienda de la S para que ellos hagan lo que mejor les parezca... y yo, podré decir que no al redondeo con la conciencia un poco más tranquila.

Mañana es probable que entremos a la nueva etapa: reducción de cartón plastificado y aluminizado (tetrabrick o tetrapack), así que Diego ya leyó las instrucciones de preparación de la leche en polvo.

7 comentarios:

Valjean dijo...

Una deliciosa y apetitosa caguama, lástima del horario de venta de alcohol, estaría comprando una en vez de escribiendo esto. Si tomamos en cuenta que cada caguama vale, en horario legal de venta, alrededor de 20 pesos, 25 si quiere un caguamón. El señor tendría que aventarse 20 o 25 vueltesitas a la colonia. Necesitaría 25 kilogramos de PET, osease tendría que ir a la tienda S con alrededor de 725 y 800 botellas de PET, tomando en cuenta que una botella de agua de 1L pesa 35gr y la de 600mL de coca a partir del año pasado pesa 20gr, pobre hombre. ¿Valdrá la pena caminar tanto por una sola caguama?. Yo creo que no, más cuando lavando carros o en cualquier otro oficio te remuneran más y puedes comprar, obviamente, más caguamas. Además puede que el señor ya esté haciendo su labor ecológica. Si compra caguamas retornables no genera basura, en este caso al planeta le conviene más que el señor se embriague felizmente con envases retornables, en ves de estar generando montañas de botellas de PET, o vidrio. En conclusión es más ecológico tomar caguamas en envases retornables que tomar refresco. ¡SALUD!

P.D. Quizá en realidad la razón de la existencia del hombre es para generar plástico. http://www.youtube.com/watch?v=eScDfYzMEEw PLANET IS FINE PEOPLE ARE F****D

Ángela dijo...

Cuestión de enfoques.

Ángela dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Javier Garza dijo...

En la película Bee Movie, Barry Benson, la abeja que logró ganar una demanda contra los humanos por explotación hacia las abejas, dice algo muy bonito cuando le dicen que las abejas en teoría no deberían volar.
Nuestra forma de trabajar les parecerá un misterio, porque hacer miel requiere de muchas abejas, que hacen muchos trabajos pequeños. Pero les voy a contar algo sobre trabajos pequeños: si se hacen con cuidado suman algo enorme. Más de lo que pensamos.
A esto se le conoce en física estadística como “efecto colectivo”, en España le llaman “comportamiento colectivo”, en inglés es simplemente “collective behaviour”. De acuerdo a esa premisa para que tenga un impacto importante la recolección de envases de PET –cuya contaminación es principalmente visual ya que difícilmente interfiere este material con procesos biológicos- se requiere que todos recolectemos envases, o al menos la gran mayoría. Pero esto carece de sentido porque si la gran mayoría recolecta envases entonces implica que no los tiran.
El escenario ideal sería que ninguno tiráramos envases de PET, ni de HDPE, ni de PP ni de Al, ni de vidrio, etc.
Pero continuando con tu propuesta, ojala más gente se sume a la recolección de envases, recoger cien, doscientos, trescientos envases diarios es una labor realmente pequeña, en el enorme colectivo es insignificante, pero si muchas, muchísimas personas hacen esa labor pequeña se sumaría algo enorme.
Nike: La empresa de ropa y calzado deportivo NIKE tiene ya casi una década reciclando polímeros, en esta justa futbolística es la primera vez que se emplearán “jerseys” para las distintas selecciones, hechos 100% con PET reciclado. NIKE recolecta alrededor del mundo zapatillas deportivas (tenis) y las recicla haciendo con éstas canchas de tenis, de basketball, y pistas de atletismo.
Apple: La empresa de la manzanita usa vidrio en vez de polímero en sus pantallas, invierte en sistemas de enfriamiento y lámparas o LEDs de última generación para ahorrar energía, su “software” es hasta 90% menos conflictivo con lo que se ahorra energía debido a que las computadoras son más eficientes, podríamos decir que usar Windows contamina. El policarbonato de sus laptops se recicla para hacer anteojos y básicamente las carcasas usan aluminio anodizado, los iPods usan acero inoxidable. El vidrio está libre de mercurio y otros “bichos” tóxicos. Sin mencionar que están rebonitas.
Yo les propongo que cuando compren tenis compren NIKE y cuando compren computadoras compren Apple. Tal vez inviertan más, pero además de la satisfacción de un buen producto estarán ayudando al planeta, de acuerdo a la óptica de los ambientalistas.
Saludos y felices efectos colectivos.

Javier Garza dijo...

No sé si vaya a causar conflicto en alguien lo que escribí sobre las Mac. Pero son computadoras que duran hasta tres veces más antes de volverse obsoletas, lo que implica una mucho menor contaminación y en el largo plazo un enorme ahorro para la economía familiar o personal.
Qué bonito educar con el ejemplo. Los profesores tienen un papel importante en ese aspecto. Un niño aprende de sus padres, un adolescente de sus amigos y un joven de sus profesores, porque es una etapa en la que surgen otro tipo de admiraciones. Si queremos un mundo sano los profesores tienen la obligación de ser personas integrales o íntegras, es decir, de crecer continuamente física, mental y espiritualmente, de manera que vean ese crecimiento como algo normal. Yo estoy convencido de que no vale la pena crecer intelectualmente sin el aspecto espiritual (no necesariamente religioso) y físico. Casi todo lo que viene en envases de plástico es basura para el cuerpo, insisto, casi todo.
Saludos y felices efectos colectivos

Ángela dijo...

Gracias Paco, ese era el punto. Mi labor, la de mi familia tal vez no se ve pagada económicamente, pero nosotros nos sentimos bien así y tenemos la esperanza que alguien, alguna vez, cuando camine por la calle y vea que cada banqueta es un pequeño chiquero en lugar de solo quejarse se digne a levantar eso que le estorba a la vista.

Francisco dijo...

Excelente labor la que hacen con Diego y también las aportaciones que haces en tu Blog para crear un poco de consciencia. Como mencioma Garza lo mejor sería nadie tiraramos envases en la calle, pero, aveces dá miedo la increible frialdad con la que niños y adultos sacan la mano por la ventana del coche y avientan el envase... lo hacen con demasiada facilidad a pesar que se nos bombardean con mensajes de No Tirar Basura. ¿Será por que alguna vez vieron a sus Padres, Mentores, Maestros hacerlo?.
Letrero en una carretera: "No tire Basura, llevesela a su casa" .... tan fácil como eso.